LÁMINAS DE PASTA PARA ROLLITOS DE PRIMAVERA

A veces, buscar algún ingrediente se convierte en una guerra sin final, o no lo traen o no han oído hablar de él en tu tienda habitual. Hace tiempo compraba las láminas para rollitos sin problemas, después sin motivo aparente dejaron de traerla, y más recientemente, las he visto de arroz, que me encanta para preparar en frío, pero, no como la versión que me gusta de los rollitos, y por mucho que quiera, la pasta o masa phyllo es demasiado delicada para según qué platos, así que casi lloro de alegría cuando ojeando uno de mis tropecientos libros me encontré esta receta para hacer la masa casera ¡¡ yupiiii !!. Ahora sólo queda probar qué resultados da, ya que es la primera vez que la hago.
Se puede usar tras su paso en la plancha, freirla después de la plancha, varias versiones de paquetitos wonton, un montón de posibilidades que en esta entrada os iré poniendo las recetas que voy preparando con esta pasta.
Un consejo, hay que hacerlas lo más finas posible, irlas apilando como se hace con las tortitas para que se mantengan jugosas y calientes. Son parecidas a las crepes, salen muchas, yo preparo la mitad.

LÁMINAS DE PASTA PARA ROLLITOS DE PRIMAVERA

Sin freir, ya pueden comerse así, son como crepes, pero, fritas quedan crujientes y realmente delicioso !!

Y fritos ...

Ingredientes ( 20 unidades ):

- 600 gramos de harina, de todo uso

- 1 cucharadita de sal

- 450 ml de agua fría
 4 huevos batidos

- 6 cucharadas de aceite vegetal, el mío de girasol

Preparación:

1) Tamizar la harina y añadir la sal, mezclar bien. Hacer un hueco central, echar los huevos batidos, mezclar bien.

2) Añadir poco a poco, el agua mientras vamos mezclando hasta que quede una pasta espesa y homogénea. Por último, añadir el aceite y mezclar.

3) Calentar una sartén antiadherente, poner 3 cucharadas de masa y girar la sartén para que se reparta bien. La lámina estará lista cuando los bordes se despeguen de la sartén. A medida que se vayan hacienso, se van apilando para que mantengan el calor. Son ideales para llevar a la mesa con el resto de ingredientes y que cada comensal se sirva.