ITALIA: FOCACCIA DE FRESAS CON CEBOLLA CARAMELIZADA AL BALSÁMICO Y SIROPE DE ARCE

El título es largo de narices, la receta gracias a Dios no tanto jeje, si es sorprendente en ingredientes y en sabor, fue amor a primera vista, así que hoy que no hemos salido de casa ha sido el día ideal para probarla.

A veces, cuando me gusta una receta de un blog inglés o americano, me pienso bastante hacerla o no, no tengo problemas con la traducción, pero, me toca las narices tanta medida: oz, pound, cups, ..., cuando no te ponen algunas medidas de productos que sólo venden allí: 1 tub whipped cream, hala toma ya y cuántos gramos tiene el tub ???? pues venga, Carmela, a buscar en google imágenes del tub para intentar hacer la receta. Peroooooooooooooo, encuentras algunas recetas que no te dejan pasar de largo, merecen el esfuerzo extra de la conversión de medidas y las búsquedas de ingredientes, como esta focaccia de sabor altamente adictivo, tan diferente y tan exquisito, os la recomiendo.

Este tipo de pan a mi personalmente me encanta, es esponjoso, el toque del aceite de oliva da una corteza suave y sabrosa al mismo tiempo, las fresas aportan frescor y aroma, la cebolla caramelizada con el vinagre balsámico y el sirope de arce aporta textura, la albahaca, en mi caso hierbabuena, un toque especial que potencia los demás sabores, me he enamorado de ella qué queréis que os diga. Vamos a la receta.

Fotos, redacción y traducción: Carmela
Fuente: www.saveur.com ( receta

FOCACCIA DE FRESAS CON CEBOLLA CARAMELIZADA AL BALSÁMICO Y SIROPE DE ARCE

 

 

 

INGREDIENTES ( 1 pan focaccia grande, un molde de 23 cm x 32 cm aprox. ):

 

Para la masa

 

- 320 gramos de harina de fuerza ( yo añadí 2 cucharadas más )

- 250 ml de agua caliente

- 1 cucharadita de miel, 5 ml

- 6 gramos de levadura seca de panadería

- 1 cucharadita de sal

- 60 ml de aceite de oliva

 

Para la cobertura

 

- 5 cucharadas soperas de aceite de oliva ( 1 para freir la cebolla, 1 para engrasar el bol, 2 para pintar la masa, 1 para pintar el conjunto )

- 1/2 cebolla

- 2 y 1/2 cucharaditas de vinagre balsámico

- 1 y 1/2 cucharaditas de sirope de arce ( se encuentra fácilmente en Carrefour y en otras grandes superficies )

- 1 taza de fresas cortadas en rebanadas

- 8 hojitas de albahaca fresca

- Sal

 

 

PREPARACIÓN:

 

1) Para la masa:

 

Poner en un bol mediano el agua, la miel y la levadura, mezclar bien y dejar reposar unos minutos hasta que salgan burbujas de aire a la superficie. Añadir el aceite de oliva y mezclar todo bien, reservar.

 

 

 

 

 

 

 

Tamizar la harina con la sal, abrir un hueco central y verter la mezcla anterior, unir todo poco a poco en un bol amplio, cuando se separe de los bordes del bol volcar en la mesa de trabajo y amasar bien hasta que quede elástica y homogénea la masa, formar una bola y poner en un bol aceitado con 1 cucharada de aceite de oliva. Tapar con film aceitado y dejar reposar 1 hora y media.

 

 

 

 

 

2) Mientras, pelar la cebolla y cortar en rodajas finas, deshaciendo con los dedos los anillos para que queden tiritas finas. Poner en una sartén 1 cucharada de aceite de oliva, verter la cebolla y caramelizar cocinando a fuego lento. Cuando esté blanda y ligeramente dorada, añadir el vinagre balsámico y el sirope de arce, cocinar 3 minutos más para que se evapore el líquido. Dejar enfriar completamente.

 

 

 

 

 

 

3) Extender la masa en forma de rectángulo sobre un molde engrasado de 23 x 32 cm aprox. Darle forma con los dedos, marcando la masa con la punta de éstos. Pintar con 2 cucharadas de aceite de oliva y dejar reposar, tapada unos 30 minutos.

 

 

 

Precalentar el horno  a 240º.

 

4) Poner las fresas cortadas por encima de la masa apretando ligeramente. añadir la cebolla caramelizada y las hojas de albahaca fresca lavada, seca y picada fina ( yo no tenía albahaca fresca, la he sustituido por hierbabuena y le ha quedado genial el toque mentolado a la fresa ummm ). Volver a pintar con 1 cucharada de aceite de oliva. Espolvorear por encima una pizca de sal.

 

 

 

Hornear a media altura, calor arriba y abajo, a 240º unos 20 minutos, hasta que se dore. Dejar enfriar en una rejilla antes de cortarla.

 

Está deliciosa, tanto que me ha sorprendido mi marido cuando me ha dicho que le ha gustado, él que no es amigo ni de los panes que llevan aceite de oliva ni de las hierbas, alucinada me he quedado.